El maleficio de Grecia

El sábado se disputó el choque entre España y Grecia correspondiente a los octavos de final en Turquía. Tras los altibajos de la primera ronda afrontábamos un partido muy complicado. España brilló con ese juego que la ha hecho campeona del mundo y por cuarto año consecutivo (final mundial en 2006) se impuso a la competitiva selección griega. Los griegos salieron a derrotar de una vez por todas a su particular bestia negra con mucha intensidad, concentración y ansias por llevarse la victoria. Pero nosotros respondimos con un baloncesto de mucha calidad aguantando el empuje griego en el primer y tercer cuarto. Y poco a poco la máquina de sumar puntos hispana adelantó a la griega y todo gracias a la buena actuación del banquillo. Ya lo pensé al principio del campeonato, España necesita de la aportación del banquillo y finalmente esta llegó. Los minutos demás que pudieron jugar contra Líbano y Canadá sirvieron para que cogieran confianza y se metieran en el campeonato de una vez por todas. Fran Vázquez estuvo inmenso a pesar de marcar solo 6 puntos. La defensa zonal y las buenas actuaciones de Llull y López siempre apoyados por Vázquez dieron el empuje final a la selección. Hasta un total 28 puntos aportó el banquillo de los 80 totales sobre los 72 griegos.Bourousis hizo su segunda falta personal al final del primer cuarto lo que parecía pronosticar una ventaja para España, pero Schortsanitis tenía una idea distinta. Su gran actuación nos hizo mucho daño aún contando con la gran defensa de Fran. Su gran envergadura anuló a nuestro Marc que acabó el partido con solo 4 puntos y la ausencia de Bourousis ni se notó. Ricky aunque no estuvo mal, tampoco tuvo una de sus excepcionales actuaciones y Garbajosa solo aportó un triple al principio del partido. Navarro estuvo glorioso y Rudy se sumó a la fiesta en la segunda parte.
Con todo hemos demostrado la importancia de la aportación del banquillo manteniendo un nivel de intensidad y concentración necesarios para ganar un mundial. Hemos jugado como campeones y si conseguimos mantener el mismo nivel en los partidos que nos quedan tenemos muchas posibilidades de llevarnos el oro.
Nuestro próximo rival es Serbia, a la que ya batimos en la reciente final europea, pero no nos fiemos, tienen un gran equipo. Y en la lontananza (siempre que ganemos, claro) se atisban Turquía, los anfitriones, y USA en la final. Menudos partidos nos esperan!!