18 agosto 2011

VSS = grandes cambios

En alguna entrada pasada ya os expliqué lo que es VSS.
Lo cierto es que han sido dos meses pensado sobre que hacer. Esos meses eran el tiempo que teníamos para solicitar la baja voluntaria. Unos cuantos la solicitaron de primeras y desde entonces las bebibas a modo de despedida se han sucedido continuamente viernes tras viernes.
Tras esperar durante más de un mes a ver si mi situación mejoraba decidí tener una charla con mi actual jefe. En ese momento todo se aclaró.
Las cosas en la empresa no van tan bien. Somos una empresa que basicamente desarrolla proyectos para futuras lineas de tranvía o metro. Hemos finalizado las líneas que estaban en construcción, en dos líneas se ha finalizado el proyecto y están en trámites para obtener el permiso de construcción y la tercera linea, la más importante y costosa, tiene el permiso de construcción, pero conseguir financiación para su desarrollo parece cosa de épocas pasadas. Finalmente hay una línea en fase de diseño, pero ante el actual panorama evoluciona lentamente y corre el riesgo de que se paralice el proyecto. La empresa esta a la espera, una excesivamente prolongada y agónica, de que el gobierno tome decisiones sobre los proyectos y con la esperanza de que financie el más barato de todos: la interconexión entre las dos líneas existentes.
Supuestamente el gobierno hablará en Septiembre aunque algunos se muestran excépticos sobre esto. El caso es que el ambiente de trabajo se deteriora día a día y algunos preferimos irnos. Espero que alguno de los proyectos finalmente consiga financiación o mi empresa quedará reducida a operaciones de mantenimiento.
Volviendo a la conversación con mi jefe: me dejó claro que no había ninguna opción para mi de conseguir un puesto como calculista de estructuras ya que hay muy poco trabajo dentro de la empresa en ese puesto y que ni siquiera en los mejores tiempos hubiera tenido una opción. Y en cuanto a puestos en otras disciplinas, pues en ningún momento he tenido ninguna opción. Así pues mi cuerpo quedo liberado de esa incertidumbre que le acechaba: cogeré el dinero y me iré a probar suerte en otros lares.
Y todo pasará en seguida. Mi último día en la empresa será el 26 de Agosto. Recibiré un cheque por aproximadamente el mismo dinero que ganaría trabajando hasta el fin de mi contrato el 31 de Diciembre y además podré cobrar el paro. El plan es sacarme el CAE y posiblemente el IELTS por temas de visados, hacer algún curso sobre los Eurocódigos en el Reino Unido y ponerme a la busqueda de trabajo como calculista de estructuras. Cierto que estos no son los mejores momentos para la profesión, pero el mundo es mi ventana.
Por lo pronto estimo que hasta año nuevo me quedaré por Dublín y espero que a comienzos del año que viene tener ya un destino. Es tiempo de cambios. No tengo miedo a enfrentarme a está nueva situación ya que estoy preparado para ella. ¿Alguién más se anima?

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