Lituania nos lo dejó bien claro en el último partido de preparación dejándonos 22 abajo. Pero no aprendimos. Y en el primer choque oficial Serbia nos barrió por 9 puntos. Esto complicaba sobre manera las cosas y todo pasaba por ganar hoy a Gran Bretaña. Un rival medriocre aunque correoso, pero que la selección española de los grandes momentos hubiera barrido por 25 puntos.
En el primer cuarto de España volvimos a ver el brillo de los nuestros. La clave una OPRESIVA DEFENSA. Sí, es difícil manter una intensidad defensiva tan alta, pero señores, aquí nos estamos jugando el oro así que aplíquense. Con una buena defensa cansamos y desmoralizamos al rival, conseguimos rebotear más y se roban balones que propician los contrataques que nos disparan en el marcador. Tras acumular una ventaja de 10 puntos pasamos a vivir de rentas y jugando a tirones lo que nos trajo momentos de tensión en el último cuarto cuando los británicos se pusieron 4 puntos arriba. Toda España se estremeció.
Pero la intensida defensiva reaparició: un robo de Rudy culminado en mate, tiempo excedido por los británicos en ataque, cierre del rebote defensivo y Pau Gasol, el referente de todos. Si conseguimos crear una defensa de primera ganaremos este oro.

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